Hoy voy a comenzar por Silvio que, finalmente, no tenía ases en la manga. ¿De qué han servido los pagos a todos esos diputados para seguir ahí? De nada. Al final está afuera, en la calle, como los perros callejeros o los árboles sin hojas de los parques, desamparado, sólo con sus televisiones, periódicos, mansiones y amantes. Triste. Más aún que lo sustituya un técnico, un miserable técnico, seguro que aséptico, sin vicios. Pobre Silvio. Pero ya que me he metido en el asunto de los técnicos, aprovecho una frase que he oído hoy al Gran Woyming en "Al rojo vivo". ¿Estos técnicos no tienen ideología? Mario Monti otro más de, sorpresa, Goldman Sachs. Me da a mí que sí tiene ideología y de la buena, buena. La de apriétate el cinturón, la corbata y hasta los cordones de los zapatos. ¿Y quién lo pone ahí? ¿Quién cojones lo pone ahí? En principio el presidente italiano, aunque todos sabemos la verdad, es el candidato de los mercados, de la banca, de Goldman Sachs, de los neoliberales que decían hace años que se preparaba el fin de la historia. Es un paso preocupante dejar de confiar en los políticos, por incultos, corruptos e hijos de puta que sean, pero a los que votamos, para confiar en lo que nos digan "los mercados" que alguien tiene que ser, por que las órdenes las recibimos alto y claro.
Otro punto de los de hoy, jueves 17 de noviembre, a tres días del desastre, es que va a ser de nosotros. Sí, lo pregunto de esta forma tan apocalíptica por que es como lo veo, yo y mi alter ego futurólogo, el gurú de los cárpatos. Rajoy ya ha dicho hoy que va a recortar en todo menos en pensiones. Traca, ni ha esperado a ganar. Sanidad, educación son un apetecible bocado para esos mercados siempre hambrientos. Privatización ya, la calidad, si la quieres, te la pagas. Y ese dinero no va a ir al estado, no. Va a unas empresas que van a cobrarte por lo que antes pagabas al estado (la sanidad y la educación no son gratis, la pagamos con los impuestos, coño ya).
Ahora voy a hacer una referencia cinematográfica. Robocop, esa peli, donde la policía era una empresa privada, los desahucios eran comunes y las revueltas en las calles peligrosas. No es 1984, no. Es una peli de ciencia ficción del 87, que nos insinúa un futuro de mierda que se va, poco a poco, cumpliendo. ¿Queremos un mundo así?
Otro tema más, la votación del domingo. Ya sé que las encuestas dicen que Rajoy se va a llevar la mayoría absoluta. Yo aún tengo confianza de que los indecisos den el golpe. En un domingo ideal me gustaría que Rajoy perdiera, me tocara la quiniela y ... me reservo cosas.
Por último, despedirme hasta el lunes, donde el post será, mucho me temo, apocalíptico.
A MI MEJOR AMIGA
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Estaré contigo hasta el final te buscaré en todas partes bajo la luz y las
sombras en los dibujos del aire Estaré contigo hasta el final te pediré de
rodil...
Hace 4 años
2 comentarios:
¿Voy mu descaminado si digo que tenemos (y tendremos) no que nos merecemos (y merezcamos)? La frase está más vista que los caballitos de la feria, pero sirve, me parece. Salud(os), Soyun.
Puede ser, puede ser. Tendremos que cambiar. Gracias por pasarte.
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