Estuve ayer viendo parte del programa en el que al señor Rajoy le hacían cien preguntas personas de la calle, gente "normal" según sus propias palabras. Este tipo tiene una capacidad salvaje para la demagogia y el mareamiento de perdiz. Que forma de irse por los cerros de Úbeda, que capacidad de análisis, que raciocinio de tres al cuarto. Desde luego no es Acebes (tan apreciado por mi), ni Zaplana (el rey de la especulación, tanto urbanística como puramente conspiratoria). Rajoy tiene un talento especial para comerse marrones, ayer se demostró. Desde "yo no he visto ninguna bandera preconstitucional", hasta "quedo con usted y hablamos del estatut y de lo que usted quiera". Un genio del quedar bien. Incluso le oí algún piropo "no es usted tan mayor, bueno, o al menos a mí no me lo parece". en fin que sin lugar a dudas es un genio, el hombre que necesita España, el salvador de todos nosotros y nuestras almas, casi perdidas en el limbo del purgatorio. Coño, Mariano, no me mires así que te estaba echando un piropo.
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