viernes, 13 de enero de 2012

Corre, Mariano, corre.

Los políticos nos mienten a sabiendas. Saben, cuando dicen una mentira, que los cogeran, conocen el refrán. Pero les suda la polla (siento ser tan explícito, pero hay cosas que son así). Saben que una, dos, diez mentiras no van a restar credibilidad a la clase política, por que poca le queda ya. Saben que sus votantes más "liberales" están cabreados con él, por que lo que más le pone a un liberal es que le digan que le van a bajar los impuestos y Mariano no ha parado de repetirlo en campaña. Me los puedo imaginar en su sillón, viendo las noticias, con una copita de coñac, pensando en como iban a caer sus gastos por impuestos, arggghh (es difícil construir onomatopeyas de gustirrín). Y ahora, con la subidita del IRPF, no sé que pueden estar pensando.

Y es que subir impuestos es intervencionista, poco "liberal" y cabreante para determinados sectores de la sociedad. Ni que decir tiene que Rajoy me ha sorprendido de forma agradable, quizás por que yo soy intervencionista y poco "liberal", a la par que cabreante para determinados sectores de la sociedad. Desde aquí les digo que no se preocupen que Rajoy acabará cabreándome más a mí que a ellos (con la próxima subida del IVA, que son indirectos y nos joden más a los que no tenemos un gran poder adquisitivo).

Y es que a Mariano le gusta meterse en charcos, comentar cosas aún teniendo claro que le saldrá el tiro por la culata. Y le gusta por que sabe que los ciudadanos tenemos la memoria de un pez espada y por que a sus votantes les gustan las conspiraciones judeomasónicas bolcheviques. Por eso tampoco recordarán que ahora dice que no subirán el IVA. Juas.


Y es que el recién elegido presidente de España sabe moverse. Poco y en silencio, como los perezosos (el animal), por que sabe que al final la paciencia da sus frutos. Y después de ganar a la tercera a ver quien es el listo que se atreve a decirle nada.

3 comentarios:

jaramos.g dijo...

Los votantes marianistas, el público en general, piensa que esta mayoría absoluta es nuestra última y definitiva oportunidad. Si fracasa, será el llorar y crujir de dientes. Es cierto, como dices, que Rajoy tiene cachazas, mucho aguante, como los buenos porteros ante el avance en solitario del delantero enemigo. Veremos a ver qué pasa. Queremos que todo vaya bien, lo necesitamos. Pero...

Soyunmendrugo dijo...

Ya noto los dientes crujir, pero a lo mejor me hace falta ir al dentista.

Anónimo dijo...

En un país de borregos en el que se sigue alimentando sin queja el bipartidismo y la lacra de la casta política y allegados (sindicatos, patronal, bancos, cargos a dedo, etc) como un "mal necesario" con nuestros dineros, ¿cómo pedirle al inculto español de a pie que reaccione ante los sinvergüenzas que gobiernan y dirigen España para alimentar al acaudalado, y de paso, perpetuarse ellos como garrapatas del poder?

Es como pedirle al ciego que vea, o más aún, pedirle al necio que piense y reflexione.

¡Viva la España profunda , inculta y manejable! Por eso cada día me siento más esquimal.