Que vida esta

Te mueves de un sitio a otro y da igual. Tú sigues siendo la misma persona. Pero algunas cosas cambian. No lo ves en el día a día, tienen que pasar unos meses para poder notar la ruptura del equilibrio diario. Los bares que cierran y abren (ya no sólo abren, estamos en crisis), como cambian de lugar las obras(pero siempre están), el aumento del uso de las prendas de abrigo (digo yo que será esta llegada del otoño tan repentina). Cuando vuelva al sitio donde vivo ahora (espero que por poco tiempo) también se habrá producido esos pequeños cambios (aunque imagino que no el uso de las prendas de abrigo, que ahora vivo en canarias).

Bueno, todo esto es un poco mierdoso. Sólo una impresión. Pero, que cojones, nunca está de más un poco de autoayuda.