El fuego es una mierda cuando deja esas manchas negras en nuestros montes. Es la noticia de agosto que no nos gusta oir, pero que siempre llega. Hoy me he enterado de que el fuego de Fornelos de Montes me ha tocado más de cerca de lo que yo había pensado. Uno de los muertos era un chico que conocía, un tipo que me caía bien, un amigo al que no voy a volver a ver en los peores antros, mirándome desde su copa de licor café. Por eso este post.
Era filósofo pero el mundo no le dejo ejercer, por eso era brigadista. Yo lo conocí en Santiago, cuando estudiaba y de esa época guardo una de mis anécdotas favoritas, la de como se llama este libro. Debio de ser la única noche en Santiago que estuve en vela sin probar una gota de alcohol. La noche pasó sin que resolvieramos ni uno de los acertijos de un condenado libro lleno de zombies que mentían, vampiros que decían la verdad, o al revés. Al cabo del tiempo nos seguimos viendo y siempre recordabamos aquel libro, el único libro que ha sido capaz de insultarme.
Hoy pediré dos tequilas en la barra del último bar. A su salud.
A MI MEJOR AMIGA
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Estaré contigo hasta el final te buscaré en todas partes bajo la luz y las
sombras en los dibujos del aire Estaré contigo hasta el final te pediré de
rodil...
Hace 4 años
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