Así nadie podrá equivocarse. El clásico listillo del parchís cree que es un tipo muy listo, alguien que cree que está ya de vuelta de todo. Por supuesto sabe más que tú. Las duda no entra en sus planes. Para que.
Hacen filosofía de recreo, pero para ellos está más allá del bien y del mal y la psicología barata está a la orden del día en sus conversaciones, aunque no tengan ni puta idea ni de psicología ni de conversaciones. Y todo el mundo tiene un amigo listillo del parchís.
Hay quien os dirá que perdéis el tiempo al hablar con ellos, que sus posiciones son irreductibles y no van a cambiar su forma de pensar. Esa gente tiene razón. Pero yo creo, que aunque no se rehabiliten de sus malos hábitos, por lo menos te quedas más tranquilo.
Por si aún no os ha quedado claro como reconocerlos ahí va una pequeña descripción. Le gusta mantener un tono de voz más elevado que la gente que habla con ellos, son vehementes en su forma de hablar, utilizan términos despectivos hacia sus compañeros de discusión para intentar minar su autoestima durante la misma, generalmente tienen una visión simplista de la vida en la que predominan tonos negros y blancos y, por último, su retórica pierde aceite por todas las tuercas de su engranaje mental, un engranaje mental a punto de irse a tomar por culo.
En el final de la discusión el tipo se va muy ufano y, con los días, tiende a pensar en lo bien que quedo durante el intercambio de pareceres. Sí, su visión de la realidad está empañada por un montón de mosquitos muertos y cagadas de pájaros sobre el parabrisas de sus sesos.
Un último apunte, cualquier día te puedes llegar a ver reflejado en en esta descripción. No le des importancia, le puede pasar a cualquiera.